Seguramente, si has estado investigando acerca de la operación de pecho, te hayas encontrado con muchas preguntas que hablan sobre cuándo se produce el ablandamiento de los senos. En el artículo de hoy, vamos a tratar el tema de cuándo se ablandan los senos operados.
Todo sobre el ablandamiento de senos operados
Es habitual que durante las semanas posteriores a la intervención de aumento de pecho, las mamas estén induradas, inflamadas e incluso haya sensaciones “raras” en la glándula mamaria como de crepitación e incluso de adormecimiento en la piel.
En general, los senos operados empiezan a notarse más blandos a partir de un mes o un mes y medio, aunque puede tardar un poco más en conseguir su aspecto y forma definitiva hasta lograr un tacto natural. Depende, en buena medida, de la evolución que experimente cada persona durante el periodo postoperatorio.
Sin embargo, existen varios métodos que puedes aplicar para conseguir que este ablandamiento se dé más rápidamente y, además, sea más efectivo, logrando un tacto más agradable y natural.
Estas técnicas pueden variar, pero la más efectiva sin duda son los masajes de drenaje linfático durante el periodo postoperatorio de aumento de senos en Valencia, que consisten en masajes muy suaves que se inician a los 5-7 días tras la intervención para disminuir la inflamación y favorecer la reabsorción de algún hematoma que hubiese aparecido debajo de la piel. De esta manera, conseguiremos acortar el periodo de recuperación, permitiendo a la paciente reincorporarse a su puesto laboral en un periodo de tiempo más breve.
El número de sesiones necesarias de masajes de drenaje linfático dependerá de la inflamación inicial, de la evolución de cada paciente y de la respuesta que vaya experimentando con el paso de los días, oscilando habitualmente entre 5 y 10 sesiones.
Por supuesto, es muy importante que dichos masajes de drenaje linfático sean llevados a cabo por una esteticista o fisioterapeuta especializado en este tipo de técnicas, pues de lo contrario perderán su efectividad.
Además, al principio, la incisión por donde se ha colocado el implante mamario también estará dura y enrojecida. Para estimular la maduración de dicha cicatriz, es aconsejable masajearla con aceite de rosa mosqueta o cualquier otra crema cicatrizante.
En este caso, el masaje de la cicatriz para favorecer su maduración y ablandamiento lo debe realizar la propia paciente, preferiblemente dos veces al día, durante los primeros meses tras la intervención.
Con eso, conseguirás ablandar tus pechos más rápido y de una forma más segura.
Como has podido ver, es normal que los pechos estén duros después de la operación de aumento mamario, pero dicho endurecimiento será más importante durante las primeras semanas, para posteriormente ir ablandándose progresivamente con el paso de los meses, consiguiendo finalmente un aspecto y tacto muy natural.