Existen distintos tipos de pezones debido a que la forma, el tamaño, la areola y el pezón son aspectos que varían en los senos de cada mujer. De forma silenciosa, muchas chicas suelen acomplejarse porque no les gusta cómo son sus senos o saben que tienen alguna anomalía en cualquiera de los aspectos de esta área de su cuerpo. Sin embargo, lo que ellas desconocen es que muchos de los problemas que creen tener se pueden solucionar de una manera práctica o consultando a un especialista.
Esta premisa se aplica de manera particular para los pezones, los cuales suelen ser diferentes en cada mujer. Esta diminuta zona del seno llena de terminaciones nerviosas es determinante para una fémina en sus momentos íntimos, para elegir su ropa interior e incluso en el momento de amamantar a su bebé. En este último caso, es bastante útil saber qué tipo de pezón posee para prepararse previamente de manera física el momento de ofrecer la lactancia materna.
Anatomía del seno: tipos de pezones
En este sentido, conozca cuáles son los diferentes tipos de pezones que existen en las mujeres:
Pezones comunes: sobresalen de forma natural del seno y se endurecen en caso de ser estimulados o ante cualquier tipo de cambio brusco de temperatura. Son ideales para amamantar a un bebé, ya que le ayudará a encontrar el seno en el momento de succionar la leche materna.
Pezones planos o cortos: generalmente no sobresalen de la areola a menos que sean tocados por alguna superficie o se produzcan cambios determinantes de temperatura. Pueden generar algunos inconvenientes al inicio del proceso de la lactancia materna; sin embargo, el bebé se encargará de formar la estructura de manera apropiada. El uso del aparato para sacar la leche es bueno para alcanzar este fin, pero es un proceso lento.
Pezones pseudoinvertidos: parecen estar incrustados en el área de la areola, pero al ser estimulado logra protruir de manera rápida. Puede generar dificultades al amamantar a un bebé, pero con la práctica diaria puede mejorar el problema hasta desaparecer.
Pezones invertidos: se ubican de forma interna en la areola, es decir, no sobresale ningún tipo de protuberancia. Al ser estimulados, no se endurecen naturalmente y se mantienen escondidos dentro de la mama. Muchas mujeres se acomplejan por este asunto, pero la solución está al alcance de sus manos con esta práctica: con ayuda de una persona, debe ubicar una jeringa (sin la aguja) en el área del pezón y tendrá que aspirar, como si fuese a incluir líquido en esta, hasta alcanzar sacar la protuberancia.
Pezones unilaterales: ocurre cuando uno de los pezones está invertido y el otro no. Estos casos son poco comunes, pero con la técnica de la jeringa o consultando al especialista se puede lograr una solución.
Pezón grande: pueden llegar a medir entre 12 y 23 milímetros, por lo que pueden provocar náuseas al bebé durante la ingesta de la leche materna. En estos casos, la mejor opción es esperar a que el niño crezca un poco más para que su boca sea más grande y evitarle estas molestias.
Pezón accesorio: se ubica a un lado del seno de la mujer y debe ser tapado al momento de amamantar para no confundir al bebé.
Pezón supernumerario o ectópico: como su nombre indica, se localiza fuera del área habitual. Pueden aparecer en la espalda, el cuello, la cara y la vulva. Es posible que si una mujer está en período de lactancia, este pezón fuera de lugar emane leche. De ser así, se recomienda no estimularlo para que se seque el conducto interno.
Más consejos sobre los tipos de pezones
La mejor manera de saber qué tipo de pezón posee es estimularlo ligeramente y observar el comportamiento de este en ese instante. Conocer cómo reacciona esta área del cuerpo, revelará información útil para ocasiones como la lactancia materna; también servirá de complemento al realizarse el autoexamen de mama.
De igual forma, estar atenta a cualquier anomalía en esta área o con la aparición de pequeños “bultos” debajo de la piel de la mama ayudará a descartar cualquier tipo de enfermedad. Es común que las pacientes tengan temor o vergüenza de contar a los especialistas acerca de estas patologías, pero hablar de estos temas a tiempo podrían ser la clave para que el tratamiento sea exitoso y la paciente se cure.
Ya sabes qué tipo de pezón tienes. ¿Quieres saber qué tipo de pechos tienes?
Muchas mujeres, antes de plantearse la operación de aumento de pecho en Valencia preguntan cómo quedará su pecho tras la cirugía. Y es posible que una vez llegado aquí, seguramente te habrás hecho una idea de qué tipo de pezón tienes. Pero, ¿te has planteado alguna vez conocer qué tipos de pechos existen?