Vías de abordaje en el aumento mamario
Existen 3 posibilidades para colocar un implante mamario: la vía inframamaria, la vía areolar y la vía axilar.
Personalmente, me gusta consensuar con mis pacientes la vía de abordaje a utilizar, pues la localización de la cicatriz no influye en el resultado final del pecho.
Vía inframamaria
Sin embargo, he de decir que bajo mi punto de vista, la vía inframamaria es la mejor opción por varios motivos:
El surco inframamario es la opción más anatómica y menos agresiva, pues respeta la glándula mamaria.
Vía areolar
Sin embargo, cuando se utiliza la vía areolar, hay que seccionar y atravesar la glándula mamaria para colocar el implante, lo que conlleva un mayor riesgo de infección.
Además, cuando la cicatriz se coloca en la areola, tras su maduración, adquiere un color blanquecino, que contrasta con la coloración marrón areolar, quedando más visible. Por el contrario, cuando la cicatriz se coloca en el surco inframamario, pasa desapercibida pues es del mismo color que la piel circundante.
Transcurridos varios meses tras la intervención, cuando el polo inferior del pecho adquiere su forma redondeada, la cicatriz queda oculta. De esta manera, si la paciente se pone frente al espejo, no aprecia dicha cicatriz.
Vía axilar
La vía axilar es la vía de abordaje que menos me gusta personalmente, pues me imposibilita realizar la técnica de doble-plano que utilizo en muchas de mis pacientes.
También debo de mencionar que la axila es un área “sucia”, donde coexisten glándulas pilosebáceas y glándulas sudoríparas, por lo que existe mayor riesgo de contaminación del implante.
Dr. Alberto Marina, especialista en cirugía de aumento de pecho en Valencia